Bitácora de Aurora Pimentel Igea. Crónicas de la vida diaria, lecturas y cine, campo y lo que pasa. Relatos y cuentos de vez en cuando.

miércoles, 22 de julio de 2009

De todo, la mitad


Saqué la ropa para el viaje, los zapatos y las cosas de aseo.

Todo sobre la cama, extendido, para poder dejar la mitad en casa, como siempre hago.

Puedo viajar y vivir con la mitad.

La mitad de casi todo me sobra.

La mitad de casi todo ya me es suficiente.

Yo no quiero todo, sólo la mitad.

Me ducho en la mitad de agua, trabajo en la mitad de horas y estoy cómoda con la mitad de cosas.

La mitad de tu sonrisa me acoge, tu mirada de lado me atraviesa, casi mejor que no sean completas.

Con la mitad de tus palabras y gestos me he enterado, la otra mitad es hermenéutica, volver sobre lo dicho y sabido. Mejor que no.

Ni generosa, ni lista o poco ambiciosa.

Nunca queda opaco el resto. Veo la otra mitad hasta el final, lo entero. Y es por eso.

En casi todo con la mitad se puede estar muy contenta y agradecer.

Mejor que te echen de menos, nunca de más.
Y el undécimo no molestar.

De todo, la mitad.
Foto de A. Schifferstein.

9 comentarios:

sunsi dijo...

Me ha gustado mucho... mucho es poco... muchísimo este post, Aurora. Es de una elegancia y sobriedad... que invita a preguntarse qué me sobra.

Una prosa sepurada, con ritmo preciso.

Enhorabuena. Me encanta cómo escribes.

Un beso, guapa.

sunsi dijo...

Quise decir depurada. Voy directo a oftalmólogo...

María dijo...

Y a veces no hace falta ni la mitad... con un poquito de algo grande, un momento, una pequeña cosa, nimiedades, tonterías... pero que la hacen a una tan feliz!!!

Montse Viver dijo...

En cuanto a llevar exceso de equipaje,encuentro que sí, que llevamos siempre cosas de más, y las demás consideraciones muy acertadas, sobretodo la última: siempre hay que evitar estar de más y el undécimo no estorbar.
Encuentro siempre un sentido práctico en muchas de tus entradas, es casi como una guia para navegantes solitarios... en el fondo todos estamos solos, con encuentros fugaces o no tanto, pero partiendo de soledades compartidas a lo sumo.

Un abrazo.

Driver dijo...

Bien amiga, te haré caso.
Preparo la maleta para cruzar el Mediterráneo.
Aseo: líquido de lentillas, una maquinilla de afeitar y jabón.
Bañadores: uno.
Vaqueros: tres.
Camisas blancas: tres.
Polos multiverano: tres.
Zapatillas cómodas: un par.
Móvil: no.
Pasta: el billete de barco y 500 pavos.
Total peso = 8 Kgr.
...
Viene la Sarita. Peso= 56 Kgr.
Pilar, la mayor. Peso = 68 Kgr.
La Jefa. Peso = no declarado.
...
Cojo la libreta de cuentos, dos bolis y mis ocho kilos de equipaje.

A navegar.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Bueno Aurora, bueno.

De todo la mitad.

¿Me dejas que te lo saquee un poco?

Gracias.

Máster en nubes dijo...

Sunsi, me gustaba lo de sepurada, sonaba a nuevo adjetivo cultísimo ;-), y a la mitad le siguen los dobles, qué se la va a hacer.

Rocío, claro que sí, aunque a veces también te pasa que quieres más, es agradable también querer y necesitar más, y decirlo ¿no?

Montse, qué cierto lo que dices, todos estamos solos, quizás es un tema de consciencia o también de momentos darse cuenta de ello, sentirlo menos o más.

Driver, no es peso lo que tú llevas, mejor dicho el malo lo dejas, el bueno te lo llevas, es un peso que ancla como a los barcos, y es bonito que los barcos tengan anclas ¿no?

JSM, saquea lo que quieras, ahora a por los dobles, que también...

sunsi dijo...

Sepurada Aurora... No me digas que después de estar honda y profundamente preocupada en encontrar lo que me sobra... ahora vas a doblar. Espera, que me tomo una aspirina.

Besos...

Ayer( no es broma)entre María , Blanca y yo hicimos una sepuración de superfluos y que otros pueden aprovechar.... Me he quedado como Machado, ligera de equipaje ... como los hijos de la mar... mediterránea

Jesús Cotta Lobato dijo...

Ah, qué bien entiendo ahora esto de De todo la mitad.